CONSIDERACIONES SOBRE LAS FUNCIONES DE APERTURA Y CIERRE:
1) Es una redundancia calificar a este Bafíci como "politico". Y ¿porqué? Básicamente porque el Bafici es en sí un hecho político, aunque al película de apertura fuera la de Rob Zombie. Y la de cierre, el documental de Frank Zappa. Especialmente esta última, que consigna un momento de la historia de la música, del arte en general, y de la sociedad misma que no deberían ser reducidos a un mero artefacto histórico.Esas visiones están ahí, al alcance de la mano, listas para ser tomadas, subvertidas.En cambio, en este Bafici se eligió un dúo muy particular, dos mitades que no hacen uno.La primera, paradójicamente, nos habla del ayer inmediato, aquí en la Argentina, con personajes presuntamente reconocibles, y parece ocurrir en el Planeta X. Plan 9 del espacio exterior, pero en la estancia de Timote.Sus figuras -zombies que deambulan por la pantalla- son todos agonistas, advierténdonos -cual oráculo de Delfos criollo- que lo que pasó puede volver a pasar. "Esto, está pasando ahora", dice la Sarlo, con su reloj interno detenido hace mucho, mucho tiempo. Film anacrónico antes de haber sido estrenado.
2) En fin, Secuestro... huele a polilla; desde su ideología reaccionaria a ultranza se pretende erigir en faro. Apenas es la llama de un fósforo. El segundo film complementa esta maniobra de destrucción de la política, según Prividiera. Y es muy acertado.Los dos comparten algo, además de ser apertura y cierre del Bafici: son muy irrisorios en su factura. El segundo menos que el primero: Secuestro...roza lo ramplón con el "milico" de Piñeyro y su bigote cepillo.
Ecos del Bafici, cuyas resonancias vibrarán un tiempo largo en nuestras almas:
FOCO FOUND FOOTAGE. JAY ROSEMBLATT. Cortos: The Darkness of day, Afraid so, Phantom limb, Prayer. Detengámonos un poco. Obras como estas requieren un recepción y una reflexión más lenta y precisa. Es probablemente, de lo mejor que se ha visto en el Bafici. Found footage significa “metraje encontrado”. El found footage es romper palabras anteriormente ordenadas… Imágenes que en su profundidad onírica, nos quieren decir algo. Una canción quieta, resonando en el fondo de la conciencia. Entrar en un pasadizo hacia el pasado, pero lo pretérito considerado no como sarcófago inviolable, sino como jardín viviente; inspirador. Es que el pasado puede vivir sin simbología alguna. En el found footage parece advertirse todavía más la dimensión fúnebre del cine, la sensación de estar mirando fantasmas que nos interpelan. Ver los cortos de Rosemblatt producen una sensación de inminencia que todo lo impregna sin que sepamos cómo se produce ese proceso de inoculación; pero no quedamos impregnados desde la posesión, pues una de las características del pasado –cuando ha sido bien digerido y vivido- es tener la generosidad de dejar en libertad al presente. Se enciende una luz olvidada, y los espíritus afloran.
LA REINE DES POMMES,de Valerie Donzelli: una joyita, una pequeña maravilla. Canciones, amor, espíritu lúdico, poesía, magia. Con un formato levemente similar a Les chansons d' amour" de Cristophe Honoré, Valerie Donzelli cautiva desde el primer fotograma. Erotismo, risas, lágrimas.
LE ROÎ DE L`EVASION, de Alain Giraudie: pseudo comedia de tono zumbón, con diálogos forzados y demasiados plot points de guión. No conformó.
AJAMI, de Scándar Copti y Sharon Shani: potentísimo relato ambientado en Jaffa.Pura fuerza, empuje y virtuosismo narrativo. Excelente montaje. Un punto alto del festival. A este películón le ganó el Oscar ese sancocho de EL secreto de sus ojos. Sin palabras.
PUTTY HILL, de Matt Portenfeld: un muchacho muy joven muere de sobredosis en Baltimore: antes de su funeral, se reúne la familia a recordarlo.Honestidad y emoción sin golpes bajos.Interesante, sin ser una obra maestra.
VRINDAVANA, de Ernesto Vaca. Como bien dice su director, Vrindavana (principal ciudad sagrada de la India) es un estado del espíritu. Pero, ¿por qué Vrindavana?. Vrinda es el segundo nombre de Tulasi, y la la palabra “Vana” significa “bosque”.Vrindavana, entonces, se llama así en honor a Vrinda-Devi, quien realizó aquí penitencia por 60.000 años, santificando el bosque. Complacido con las austeridades de Vrinda-Devi, el Señor Visnu concedió un don al bosque de Vrindavana. "Toda penitencia allí realizada, fructificará rápidamente y concederá excelentes resultados".
Vrindavana, la película, es un gran fresco pintado por Baca con maestría sin necesidad de alardes ni virtuosismos formales; a cada acción, un plano, luego corte, y se sigue a la situación siguente. La cámara está fija durante casi todo el metraje, demostrando una posición pudorosa del director ante la enormidad del fenómeno que está mostrando, reafirmada por el hecho de que casi no hay primeros planos. El espectador entra entonces en una dimensión meditativa, en la que se deja llevar por el fluir de las imágenes de la conciencia de Baca. Vrinvavana, film que tiende a la abstracción, culmina con un plano del agua del Ganga Mai, ( “La Madre Ganges”), símbolo del eterno devenir.
CHARLIE HADEN, RUMBLE BOY. De Reto Carduff. Este documental repasa la trayectoria del bajista que tocó con todos: Pat Metheny, Ornette Coleman, Keith Jarrett; el film recorrre desde sus trabajos con Egberto Gismonti hasta Carla Bley & The Liberation Music Orchestra. Escapando del formato televisivo que suele infectar este tipo de documentales biográficos, el film también se centra en la intensa militancia de izquierda de Haden. Una yapa: la improvisación final de Jarret.
TRASH HUMPERS, de Harmony Corine: el triunfo de la postura. El pseudo niño revolucionario repitiendo sus monerías para otros pseudo rebeldes. Ahora, en VHS malo. Una vez que entraste en el chiste de la película, lo demás es repetición ad nauseam de lo mismo. Descartable.
EL RECUENTO DE LOS DAÑOS, de Inés de Oliveira Cézar: grave memorándum de reminiscencias sokurovianas sobre el mito de Edipo. Demasiado solemne y acartonado, el film se hunde en su falta de espíritu lúdico.
RUHR, de James Benning: un espíritu zen, tratando de captar le esencia del espacio, el devenir del tiempo. Una mirada distante y cercana a la vez. Muy interesante. Un dato: James tiene una hija cineasta, su obra pudo apreciarse dos Baficis atrás. Un consejo: tratar de bajarse la excepcional Girl Power, de la inquieta Sadie.
DISORDER, de Huang Weikai: excelente documental que pone en relieve las tensiones de la China moderna en su abrupto ingreso al capitalismo. Con una super 8, en blanco y negro, Weikai muestra la cara salvaje y violenta de un país que está experimentando un cambio quizá demasiado brusco
VISAGE, de Tsai Ming-Liang: aunque quizá no sea su mejor film -uno sigue extrañando obras maestras como The River, Vive l'amour o The weyward cloud-, Visage demuestra que Tsai está a años luz de muchos de sus contemporáneos.
EXTREME PRIVATE EROS, de Kazuo Hara: sencillamente, el mejor documental del Bafici, superior aún al de Phil Spector. Ficción y documental borrando sus límites en un film increíble.
READING THE BOOK OF BLOCKADE, de Alexander Sokurov. En su último film, Sokurov aborda los límites de lo irrepresentable.El horror absoluto. Como si esto fuera poco, el plano final del Museo Hermitage es lo más bello que he visto en los últimos tiempos.
PERFORMANCE; de Nicholas Roeg: la locura y la experimentación en una peli para ver con todos los sentidos. Un extraño artefacto erótico-musical-cinematográfico.
THE AGONY & ECSTASY OF PHIL SPECTOR, de Vickram Hayanti: corrosión....locura...la fuerza y el poderío del rock 'n' roll en su máxima expresión... quizá el mejor documental del Bafici...50 años de desmadre en apenas una hora veinte minutos...música excelsa...dudas...Tony Bennett...Woddy Allen...John Lennon (el quía tiene el piano de Imagina atrás del sofá)...estremecimiento...la vida como una loca carretera...una película sublime de este festival...imperdible.
NON RICORDO IL TÍTOLO, de Christelle Lheureux: Los espectros de Ingrid Bergman y Marcello Mastroianni vagan sin rumbo, tratando de comunicarse, por los vacíos escenarios de Stromboli. Film de intensa melancolía, por momentos algo moroso, su mayor valor reside en esas figuras fantasmagóricas que habitan (desde el pasado y el olvido) la pantalla.
LA VÍA LÁCTEA, de Luis Buñuel: ¿qué se puede decir de esta obra maestra que no se haya dicho ya? Un relato alucinante (y alucinógeno) de dos peregrinos a Santiago que atraviesan los tiempos Utilizando el surrealismo y la narrativa no lineal, Buñuel cuenta la historia de las diferentes herejías cristianas. La magia onírica del aragonés sigue intacta, como si el film se hubiera filmado ayer.
NY EXPORT: OPUS JAZZ, de J. L. Lipes & Henry Joost: excelente documental sobre el coreógrafo Jerome Robbins que recrea, cincuenta años después, la la música de Leonard Bernstein y las danzas del film West Side Story (Amor sin barreras). Filmada en 35 mm, con una transparencia y una luminosidad sorprendente, esta pelicula es puro ritmo, atmósfera y montaje soberbio. Recomendadísima.
LA PIVELLINA, de Rainer Frimmel y Tizza Covi: a no perderse este film, es más "narrativo" de dúo Frimmel-Covi. Una encantadora mezcla de documental, comedia y drama, filmado casi todo con cámara en mano. Una joyita.
MARAVILLOSO FINAL DE BAFICI: BUEN DÍA, DIA. De Sergio Constantino y Eduardo Pinto. Emocionante documental sobre Miguel Abuelo, realizado con grabaciones inéditas, poesías, testimonios de sus colegas y amigos. Ni la tormenta (con piedras y todo) pudo opacar la fiesta.